La Navidad es la época más esperada por los dominicanos. Esta fecha es propicia para reunirse con familiares y amigos, además de caracterizarse por su gastronomía, fiestas, regalos, colores, decoraciones y luces. Esta algarabía se siente a finales de octubre con la llegada del otoño, el cálido clima y los merengues alusivos a las pascuas.
Canciones como “Alegre Vengo”, “Volvió Juanita”, “El Santo Cachón”, Llegó tu Marido”, “Que te Pasa Viejo Año” y “El Pavo y el Burro” dan vida a esta fecha tan hermosa.
También, los aguinaldos son parte nuestra tradición, este consiste en que grupos de personas de todas las edades especialmente jóvenes, salen a las calles parándose de casa en casa para entornar cantos alusivos a la Navidad, acompañados del contagioso ritmo de la tambora, güira y el acordeón. Estos tienen brindis ligeros y bebidas calientes como son té de jengibre chocolate caliente, pan de agua, galletas, casabe y no se puede quedar el ron.
Las fiestas navideñas y angelitos de las instituciones son algunas de las actividades con que nos gozamos la navidad. Estas son una oportunidad para compartir con los compañeros de trabajos, bailar, disfrutar de un momento de ocio y saborear un rico almuerzo o cena.
Otra ocasión para celebrar es la cena de Noche Buena, realizada el 24 de diciembre y considerada uno de los ritos familiares más especiales. En ella se reúnen la mayoría de los familiares para deleitarse a plenitud con los exquisitos platos alusivos a la Navidad (telera, ensalada rusa, pavo, pollo, cerdo asado, moro de guandules, pasteles en hoja, golosinas…). Luego de cena, el dominicano se sienta en las afueras de su casa para compartir un trago de ron, cerveza o vino, además de escuchar música y “mover el esqueleto”.
El año nuevo es el día que marca el inicio de un nuevo ciclo y en donde la familia sigue reunida para abrazarse, brindar, compartir y expresar los deseos para el año que comienza y dejar atrás las malas experiencias del año viejo.
Luego de estas actividades de regocijo, familiaridad y celebración por el nacimiento del niño Jesús, llegan los Reyes Magos, el 6 de enero del año nuevo.
Este recorrido por las diferentes actividades que celebramos con alegría debe tener espacio para la reflexión y espiritualidad de cada persona, pues al comienzo de cada año nos proponemos metas y sueños, con los cuales pretendemos ser mejores seres humanos. Todo esto debe estar acompañado del amor al próximo, humildad y el bien común.