Juan Febles, 2017

Resumen

En esta investigación, se plantearon una serie de recomendaciones para poder posicionar de una manera estratégica la gastronomía Dominicana como una variación alternativa del producto turístico consolidado asociado a la modalidad de sol y playa. Por estas razones, se consultaron distintos aspectos teóricos relacionados con el marketing turístico, así como de la planificación estratégica, con el firme propósito de poder sustentar bajo la premisa bibliográfica, los elementos que conformarían a las estrategias descritas en el presente trabajo se cumplen a su vez la función de dichas recomendaciones propuestas como principal objetivo. Ante esto, se obtuvo un cúmulo de estrategias que se apoyan en distintas necesidades y debilidades a nivel de competitividad de la República Dominicana, con el propósito de poder tomar la gastronomía como un elemento inclusivo de los productores locales y al mismo tiempo, atender mercados alternativos de turistas que pudieran contribuir con la reducción de la estacionalidad de la demanda. Como conclusiones, se ha obtenido que la República Dominicana de hecho tiene un gran potencial desde el punto de vista del desarrollo del turismo gastronómico, si se atienden las recomendaciones estratégicas brindadas en la presente investigación. Al mismo tiempo, la presente investigación ha servido como un aporte para la República Dominicana en el hecho de que innovar a través de la gastronomía en el campo turístico y poder ofrecer alternativas a la demanda que ha cambiado en sus hábitos, costumbres, expectativas y percepciones.

Abstract

In this research, a series of recommendations were proposed to strategically position the Dominican gastronomy as an alternative variation of the consolidated tourism product associated to the modality of sun and beach. For these reasons, we consulted different theoretical aspects related to tourism marketing, as well as strategic planning, with the firm intention of being able to sustain under the bibliographic premise, the elements that would conform to the strategies described in the present work are fulfilled to their the proposed recommendations as the main objective. Given this, a series of strategies were obtained that are based on different needs and weaknesses in the competitiveness level of the Dominican Republic, with the purpose of being able to take the gastronomy as an inclusive element of the local producers. At the same time, to attend alternative markets of tourists that could contribute with the reduction of the seasonality of the demand. As conclusions, it has been found that the Dominican Republic does indeed have great potential from the point of view of gastronomic tourism development, if the strategic recommendations provided in the present research are met. At the same time, this research has served as a contribution to the Dominican Republic in the fact that innovating through gastronomy in the tourist field and being able to offer alternatives to the demand that has changed in habits, customs, expectations and perceptions.

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Este tema es muy interesante dentro del análisis, ya que la actividad turística ha evolucionado en el tiempo y de acuerdo a los postulados teóricos expuestos por Kotler (2012), el turista cuenta con mayor información en su haber, lo cual hace que éste genere unas nuevas expectativas y percepciones acerca de su experiencia turística, generando de esta forma una necesidad de innovación en cuanto al diseño de productos turísticos principales y complementarios, que puedan convertir a una oferta turística, en una alternativa bandera para la promoción y comercialización de un destino.

Del turismo transaccional al turismo relacional

En base a esto, una de las áreas que se vincula directamente con el carácter sensorial de la nueva experiencia del turismo que requiere el turista pudiera residir en la gastronomía, ya que es una acción tan fundamental como el descanso en sí. Por ello, la gastronomía es uno de los campos diversos que hacen del turismo una actividad multidisciplinaria, ya que combina elementos que requieren de una transformación técnica para ser presentados como oferta dentro del producto turístico final.

Al mismo tiempo, la gastronomía es una combinación perfecta entre las principales características presentes en la idiosincrasia de los ingredientes que la conforman y la satisfacción de necesidades y requerimientos del turista, con una orientación del despertar sus más profundas sensaciones de placer y gusto por una comida.

No obstante, en el presente documento se exponen las principales razones de definir a una tipología de turismo gastronómico para que un país con tanto potencial en esta área como la República Dominicana pueda aprovecharla, con el fin de no sólo diseñar nuevos productos asociados al turismo, sino que existan estrategias y recomendaciones para posicionar esta tipología de turismo así como la captación de un nuevo perfil del turista que puedan ayudar a combatir la estacionalidad de la demanda que es uno de los lineamientos  expresos por la Organización Mundial del Turismo (OMT), especialmente en su informe anual denominado Barómetro Mundial (2016), en el cual entre otros planteamientos, se establece la necesidad de generar productos y servicios que puedan atraer turistas en todas las temporadas del año, apuntando hacia un crecimiento sostenido de dicha actividad.

El turista y los tiempos han cambiado

En relación a esto, se tomó una definición generada por la World Food Travel Association (WFTA, 2016), quienes indican que el turismo gastronómico consiste en la “actividad en donde los turistas pueden disfrutar de ofertas que consisten en el arte de preparar una buena comida”. Todo esto tiene un sentido lógico, ya que tanto los tiempos que se viven como el turista, han cambiado para siempre ya que el turismo se debe adaptar a las nuevas necesidades sensoriales que demandan las nuevas tipologías de turistas que serán descritos dentro en esta investigación.

Adicionalmente, se ha encontrado que a partir de diversos foros gastronómicos hechos recientemente como el realizado entre el Basque Culinary Center (BCC) y la Organización Mundial de Turismo (OMT) en España (2017), han concluido que se debe innovar en cuanto a la creación de productos turísticos para responder a todas las expectativas y necesidades nuevas que ha manifestado el turista, sobre todo con el avance de la tecnología y de la evolución humana como tal.

Por todo esto, República Dominicana debe responder al gran reto de diversificar su producto principal del turismo de sol y playa. Todo esto, debido a que el turista busca generar mayores elementos sensoriales y emocionales que no puede obtener a partir del consumo de productos de turismo tradicionales.

Sensaciones y experiencias en la gastronomía

Adicionalmente, se han encontrado registros estadísticos por parte del Food Travel Monitor (2016) donde se señala que la gastronomía es un componente esencial en la actualidad dentro de la experiencia turística. Es decir entonces, que “el 86% de los encuestados afirmó que tener una experiencia positiva con la comida y la bebida durante un viaje haría más probable que volviera a visitar ese destino”, abriendo la puerta a una nueva oportunidad de diversificación.

Esto significa entonces, que si República Dominicana pudiera desarrollar una innovación en cuanto a su oferta turística basándose en la gastronomía como pilar fundamental de la promesa de servicio para el turista, pudiera estar generando desde un nuevo nicho de mercado, hasta oportunidades infinitas para la incorporación de todos los sectores productivos de la nación para que sus productos sean los principales protagonistas del proceso de producción de la gastronomía nacional.

Enfoque estratégico de planificación situacional

Ahora bien, la gastronomía en República Dominicana requeriría de un conjunto de acciones concatenadas que busquen impulsar esta oferta por todo el país pero al mismo tiempo, requeriría de un enfoque estratégico que pueda sumar los esfuerzos de cada una de las partes que integran el sistema turístico nacional de la isla para el logro de un mismo propósito, que sería innovar en el mercado de la oferta y demanda turística.

Por estas razones, se trae a colación el trabajo realizado por Streb (2015) quien analizó la teoría expuesta por el profesor John Nash, quien en su estudio asociado a la Teoría de Juegos, explica que una decisión es más productiva y contundente si en vez de beneficiar a un grupo en particular, beneficia a todos de manera individual y colectiva.

En base a esto, las estrategias para posicionar el turismo gastronómico República Dominicana, deben apuntar hacia la unión de todos los sectores productivos que forman parte del sistema turístico nacional y de esta forma, beneficia necesidades particulares de cada uno de estos pero al mismo tiempo, se generarían nuevos nichos de mercado así como ofertas turísticas que puedan por sí solas, atraer turistas nacionales e internacionales por motivos de gastronomía.

Es decir entonces, que la economía puede ser fortalecida si cada uno de los factores de la cadena de valor pueden interactuar entre sí para presentar entre todos una sola oferta competitiva que pueda diferenciarse del resto de su entorno, lo cual debe ser el enfoque estratégico de República Dominicana como destino.

Tendencias del turismo gastronómico

Por otra parte, existen tendencias asociadas al turismo gastronómico, donde todas aquellas conclusiones obtenidas en los distintos foros mundiales gastronómicos hechos en países como México, Colombia, España y Perú demuestran ciertos comportamientos por parte de la demanda turística que han dejado muchos detalles por definir.

En éstos, se vislumbra la necesidad de identificar una tipología de turistas que busca experimentar todas estas sensaciones asociadas al turismo gastronómico y de esta forma, generar productos que puedan ser comercializados para un segmento en particular que ha venido en crecimiento de acuerdo a los números de organizaciones como la Organización Mundial del Turismo (OMT) y World Food Travel Association (WFTA). Por ello, las principales tendencias del turismo gastronómico en base a las conclusiones generadas en los distintos foros se asocian a los siguientes elementos, de acuerdo con el Food Travel Monitor (2016):

Comida y bebida, una motivación en alza para los viajes: La comida y la bebida son, cada vez, una motivación más importante a la hora de planear un viaje, como demuestra el hecho de que para el 75% de los viajeros de ocio, el motivo que les ha llevado a visitar un destino ha sido la realización de algún tipo de actividad culinaria. En este sentido, debe representar una gran oportunidad para la República Dominicana el pensar que esta tendencia puede darse no sólo en este país, sino en todo el Caribe, por lo cual asumir la política en esta orientación pudiera ser fundamental para la innovación en productos turísticos.

Esencial para la experiencia turística: La gastronomía resulta esencial para la experiencia turística. En este sentido, el 86% de los encuestados afirmó que tener una experiencia positiva con la comida y la bebida durante un viaje haría más probable que volviera a visitar ese destino. Desde esta perspectiva, se sustenta una vez más el carácter de experiencias que busca el turista en actualidad para el consumo y disfrute de los productos turísticos que se le ofertan en el mercado, razón por la cual en la República Dominicana se deben considerar un conjunto de estrategias para posicionar la gastronomía en sí.

No todos los foodies son iguales: Trece diferentes perfiles PsychoCulinary explican por qué las preferencias y motivaciones difieren entre los viajeros individuales. El perfil más común es el ‘viajero ecléctico’, que busca una variedad de experiencias. Y, aunque no lo parezca, el perfil de ‘viajero gourmet’ se encuentra en minoría, curiosamente. Esto significa entonces, que estos nichos de mercado se encuentran emergentes, lo cual hace pensar que una diversificación de la oferta turística nacional en la República Dominicana, pudiera generar esos espacios de oferta y demanda que tanto buscas este perfil del turista, razón por la cual las estrategias deben estar orientadas en este sentido.

Todos comen, pero las mujeres tienden a influir más: Las mujeres son más propensas que los hombres a elegir restaurantes y bares locales, hasta el punto de que el 61% de las mujeres se identifican como ‘viajeras locales’. En este punto, se quiere establecer el hecho de que en la República Dominicana deben cementarse de mejor manera los estratos del mercado gastronómico, por lo cual la unión de los distintos elementos del sistema turístico nacional es fundamental para el desarrollo de estudios de esta naturaleza.

Es algo que todas las personas hacen: Por primera vez en la historia, la inmensa mayoría de los viajeros estadounidenses (93%) prefieren en sus viajes probar alimentos o bebidas que no sea la típica experiencia ya conocida. En otras palabras, casi todos los viajeros estadounidenses y del mundo tienen un interés en las experiencias de alimentos y bebidas únicos, del lugar. Esto es una gran noticia para el turismo nacional dominicano, ya que se pueden incorporar los distintos elementos que definen a la cultura gastronómica de la isla para ser transformados en una oferta turística apetecible y real para su comercialización efectiva.

Las personas gastan basándose en la pasión, no en sus ingresos: Independientemente de los ingresos, los viajeros culinarios dan prioridad al gasto en alimentos y bebidas, destinando aproximadamente un 50%  más de su presupuesto a la alimentación y las actividades relacionadas con la bebida de los viajeros no culinarios. Esto significa entonces, que tanto la confección de la oferta turística así como su proceso de comercialización, no puedes responder a los criterios tradicionales, ya que el comportamiento del turista ha cambiado y por lo tanto, deben cambiarse las formas a través de las cuales se presentaban las ofertas turísticas.

Más jóvenes, más interesados en la gastronomía: ¿De qué manera se relaciona la edad con el turismo gastronómico? La Generación X y los Millenials están mucho más preocupados con la comida cuando viajan que los pertenecientes a generaciones mayores. La importancia creciente de la alimentación y bebida en los viajeros más jóvenes indica un futuro muy positivo para la industria del turismo gastronómico. De acuerdo a la tendencia expuesta en este informe, la República Dominicana tiene una gran oportunidad de diversificar su oferta turística y al mismo tiempo, de incorporar a todos estos elementos productivos en la nación para que puedan ser aprovechadas sus capacidades y habilidades para la generación de ofertas turísticas gastronómicas que ayuden a combatir la estacionalidad de la demanda.

El papel impreso no está muerto del todo: A pesar de la disminución de los medios impresos tradicionales, el 92% de los encuestados afirmó que estaban motivados para viajar a un destino o experiencia gastronómica como resultado de los medios impresos (revistas y secciones de viaje de los periódicos). Esto quiere decir entonces, que debe existir una mutación del proceso de comercialización del producto turístico gastronómico, ya que deben combinarse las tecnologías de la información en conjunto con los medios tradicionales, pero diseñar la propuesta de comercialización a partir de los elementos experiencia les que es ver a vivir el turista durante el consumo de dichos productos turísticos.

Los Social Media tiene un papel importante: Los viajeros gastronómicos (34%) están más motivados a visitar un destino debido a recomendaciones o comentarios sobre comida o bebida en las redes sociales, que los viajeros no gastronómicos (23%). Asimismo, por lo menos la mitad de sus viajes, el 64% los viajeros de ocio eligió las redes sociales para compartir sus experiencias sobre alimentación y bebidas.

Esto reafirma lo planteado previamente, ya que los medios tradicionales tienen una función específica dentro de la experiencia del turista (informar acerca de los productos turísticos y destacar las bondades de cada uno de los elementos que conforman al producto). Sin embargo, las redes sociales permiten la oportunidad de hacer lo mismo, agregándole un elemento más personalizado en cuanto a las vivencias obtenidas a partir del disfrute de dicho producto turístico, haciendo obligatorio, el diseño de una estrategia asociada con el aprovechamiento al máximo de éstos medios.

Los foodies son los viajeros más ocupados: Los viajeros gastronómicos están más ocupados cuando viajan que los viajeros no gastronómicos, lo que significa que son más propensos a participar en otras actividades no relacionadas con la comida cuando viajan. A los foodies es muy probable verles también en excursiones (91%), compras (87%), y en visitas de interés histórico o cultural (85%) durante sus viajes. Esto quiere decir entonces, que la oferta existente en República Dominicana puede aprovechar el diseño de este tipo de productos turísticos basados en la gastronomía para incorporar las distintas actividades que pueden hacerse en la isla.

Metas mundiales del turismo gastronómico

Ahora bien, luego de haber visto las tendencias generadas en los últimos encuentros gastronómicos mundiales expresos a través del Food Travel Monitor (2016), se pueden generar conclusiones precisas acerca de los comportamientos que deben tener tanto los elementos que conforman a la oferta como todos aquellos elementos que se integran para el diseño y comercialización de productos turísticos basados en la gastronomía.

Por lo tanto, se debieron consultar las distintas metas que tienen turismo gastronómico a nivel mundial con el fin de estar alineados como nación a este conjunto de sugerencias, ante lo cual se consultaron las mismas y se generaron ciertos componentes que formarán parte de las estrategias para posicionar la gastronomía dominicana ante los cuales encontraron los siguientes:

Una de las primeras metas que se establecieron en los foros mundiales, ha sido la definición del concepto de turismo gastronómico, así como un perfil del turista que consumiría este tipo de productos. Asimismo, se llegó a la conclusión de que la gastronomía puede inclusive definir la idiosincrasia de un país, por lo cual su abordaje debe ser tomado con seriedad y con planificación estratégica, razón por la cual se viene fundamentando la realización de este trabajo.

Asimismo, se encuentra que la gastronomía debe tener como meta ser un elemento de sostenibilidad en el crecimiento del turismo, significando esto que se deben seguir los lineamientos de la organización mundial del turismo, quienes consideran que la sostenibilidad se basa en tres pilares fundamentales como lo son lo ambiental (reduciendo las emisiones), lo socio-cultural (la autenticidad del destino) y lo económico (que se distribuya de manera equitativa).

Esto significa entonces, que el ritmo gastronómico puede ayudar en lo ambiental, siempre y cuando la materia prima sea trabajada de una manera consciente; desde lo cultural, puede promover los elementos patrimoniales y de identidad de las localidades y desde el punto de vista económico, representan oportunidades de inclusión de todos los que conforman el aparato productivo turístico de República Dominicana.

De igual manera, otra de las metas que se ha planteado la gastronomía y el turismo a nivel mundial ha sido que el turismo gastronómico es un elemento de preservación cultural y debe configurarse en torno a calidad y la autenticidad del producto y del territorio. Es decir entonces, que en este informe lo que se buscó establecer como meta es que la identidad es lo que define a este tipo de productos y al mismo tiempo, considera al turista como un elemento activo, que busca experiencias más auténticas y vivencias locales, dejando espacios abiertos para el emprendimiento y el desarrollo de productos turísticos locales.

Asimismo, una de las metas de la gastronomía es poder contribuir con el desarrollo de economías en pequeña escala donde en todas partes de la República Dominicana, se puedan diseñar y comercializar efectivamente los productos de turismo gastronómico con el fin de crear estos nuevos nichos de mercado que permitan la diversificación de motivaciones hacia el turismo así como los indicadores relacionados con las vertientes económicas que se desprenden de la praxis del turismo.

Otro punto muy importante que se ha destacado como meta en todos los países que tienen el potencial de desarrollar el turismo gastronómico, es la coordinación de esfuerzos entre todos los miembros del sistema turístico, donde de acuerdo al informe consultado “todavía más vital si se tiene en cuenta el tamaño de los pequeños productores locales, débiles en estructura, que hay que ayudar a preservar” (p. 3).

El turista gastronómico también es prosumer: El control del mercado turístico ha virado del productor al consumidor, al viajero, que no busca un servicio sino una experiencia auténtica y memorable. Un turista culto, muy exigente, que ejerce la crítica, y que es prescriptor online al volver a su país. De acuerdo con este informe, del turista se convierte en el principal portavoz de la experiencia que ofrece el producto turístico gastronómico, razón por la cual, dicha estrategia para posicionar a la República Dominicana con un destino gastronómico, deben tener estabilización de que el consumidor pasa a ser también un multiplicador de la información de manera directa, sobre todo con el auge de las redes sociales todos los medios digitales.

Maridar la gastronomía: Hay que trabajar para posicionar la gastronomía al frente de la estrategia de destino. Todos los destinos tienen un potencial gastronómico. Es decir entonces, que la gastronomía se marida con los ingredientes del paisaje, la cultura y la historia.

Es decir entonces, que la mezcla de estos elementos haría a la gastronomía, la protagonista dentro de los factores a considerar para el desarrollo de nuevos productos turísticos que puedan diversificar la oferta y al mismo tiempo, incluir de manera masiva y directa a todos los sectores productivos de la isla.

Sin estrategia no hay resultados: Para que exista el destino debe haber recursos, pero no es suficiente. Debe de haber una estrategia, gestionar muy bien una estrategia de destino. Esto significa entonces, que el planteamiento desarrollado en el presente trabajo cobra una significancia importancia, ya que el desarrollar productos turísticos gastronómicos desde una visión empírica, lo que puede es hacer que se comprometa la calidad de la oferta turística de República Dominicana y al mismo tiempo, se pudiera estar tentando a un escenario donde se incorporen elementos exógenos a la idiosincrasia del dominicano en la gastronomía, lo cual supondría un supuesto muy peligroso para la sostenibilidad de la oferta gastronómica.

A partir de todas estas metas consultadas en el informe descrito, se debe considerar que el turismo gastronómico no solamente necesita de una definición propia para poder establecer los marcos de acción respectivos para su desarrollo, sino que de acuerdo a distintos informes consultados, existen metas mundiales que se ha planteado por parte de todo el sector turístico para impulsar esta tipología de turismo que busca ir a la vanguardia de las expectativas y necesidades del turista.

De igual manera, el turista gracias a la era de la información, se encuentra muy documentado acerca de todos los lugares que va a visitar, pero con un buen desarrollo de un producto turístico gastronómico, puede vivir experiencias únicas que no puede vivirlas a partir de una interacción electrónica a distancia.

Buenas prácticas del turismo gastronómico

Ahora bien, es necesaria la documentación de las buenas prácticas en turismo gastronómico con el fin de poder tener ciertas orientaciones que han tomado en cuenta distintos países para posicionar este tipo de turismo. De igual manera, es importante tomar las mejores prácticas hechas por las distintas naciones que han puesto en marcha planes asociados al turismo gastronómico y al mismo tiempo, tener presente todos los elementos de la oferta y la demanda para el desarrollo de los mismos, así como la inclusión participativa de todos los sectores productivos en su diseño.

Por ello, los puntos en común que han sido coincidencia en las experiencias como las de España, Perú, Colombia, México y Croacia. Por citar algunos ejemplos, la Organización Mundial del Turismo (OMT) ha resaltado diversas experiencias en turismo gastronómico, teniendo entre otros:

Puerto Vallarta (México), la meca del gourmet: El destino perfecto para los “gourmand” o personas de paladar exquisito. Se trata de la segunda ciudad, después de la capital mexicana, con mayor oferta gastronómica del país. Entre las actividades más llamativas para disfrutar de la experiencia culinaria en la zona está la de juntarse con los lugareños en los mercados locales de los sábados. Esta una práctica desarrollada en México, permite recopilar un elemento interesante para la puesta en marcha de las estrategias de posicionamiento de la República Dominicana y su gastronomía, ya que se toman en cuenta todos los elementos citados previamente.

Huelva “Capital Española de la Gastronomía”: La ciudad andaluza de Huelva ha sido elegida “Capital Española de la Gastronomía” para el año 2017, sustituyendo a Toledo (Capital Gastronómica 2016) en la consecución de este título creado hace 5 años con el propósito de favorecer el turismo a través del arte culinario de cada zona. En esta buena práctica, se siguen repitiendo los patrones operativos que definen a la praxis del turismo gastronómico como lo es la incorporación de cada zona productiva y su idiosincrasia en el diseño del producto turístico, razón por la cual debe ser uno de los enfoques estratégicos a tomar en cuenta la República Dominicana, teniendo en consideración la amplia gama de elementos que pueden ser considerados como locales.

Bogotá, Colombia: dentro de sus buenas prácticas, los factores comunes de perdurabilidad presentes en todos los restaurantes estudiados son la calidad de los productos, el buen servicio al cliente, el amor hacia la gastronomía típica colombiana, la cultura organizacional, el buen ambiente laboral, la flexibilidad del negocio, su capacidad de adaptabilidad al cambio, la proactividad y el trabajo en equipo.

Los factores diferenciadores de este país son la investigación de mercados que realiza, la previsión que mantiene sobre cualquier cambio relacionado con los precios, teniendo en cuenta que su materia prima proviene principalmente del sector agropecuario, y finalmente, el valor agregado que adiciona a cada una de sus preparaciones. Esta buena práctica resalta todos los aspectos a tomar en cuenta dentro de una planificación estratégica, ya que se consideran diversos aspectos para garantizar el éxito de la puesta en marcha de productos turísticos de esta naturaleza.

Croacia: Istria, gastronomía gourmet: Algunos de los restaurantes y tabernas de la región celebran periódicamente los “Eventos Gourmet” para ofrecer a los comensales degustaciones de los platos más típicos propios de cada temporada a precios especiales. Durante los meses más fríos se pueden encontrar “Degustaciones Gourmet” como los Días del Marisco, los Días del Lenguado o los Días del Calamar del Adriático.

Igualmente, nuevos reconocimientos a la calidad de los productos croatas registrados por la Comisión Europea de Agricultura y Desarrollo rural como el aceite de oliva de la isla de Solta en la región de Split; el cordero de la isla de Pag; el aceite de oliva de la isla de Korcula; el pavo autóctono de la región de Zagorje, al norte de Croacia; Poljicki soparnik, una especie de pastel o empanada de acelgas de la región de Split; y el jamón (prsut) de Dalmacia.

Esta una práctica suscitada en Croacia, ha dejado un elemento importante considerar que es la incorporación de los distintos productos a través de una marca patentada de calidad conocida como la denominación de origen, la cual garantiza que los productos que se utilizan para la elaboración de la gastronomía sean propios de la localidad.

Perú, turismo gastronómico inclusivo: Este es uno de los países que ha tenido mayor auge con la puesta práctica del turismo gastronómico. Es decir entonces, que han puesto en valor su gastronomía a partir del diseño de productos que para satisfacer las necesidades de la demanda, todo esto un carácter inclusivo de los productores locales así como de las personas que se dedican a este sector activamente.

La importancia de la gastronomía como un nuevo motor de la economía, ya que si bien 300,000 personas viven directamente de este rubro en el país, su trascendencia es mayor si se considera a todas las áreas productivas afectas. Se calcula que unos 5.5 millones de personas están relacionadas directamente de una u otra manera con esta actividad.

Es decir entonces, que si la República Dominicana pudiera copiar lo mejor de cada una de estas experiencias sumado a las buenas prácticas necesarias para el desarrollo efectivo de esta tipología de turismo, se pudiera estar dando una oportunidad inigualable para debilidades que se han presentado los estudios de caso así como tener en cuenta la especificidad de la situación interna dentro del país con el fin de que las estrategias apunten hacia un desarrollo integral, sustentable y preciso de la gastronomía y poderla posicionar estratégicamente en este sentido.

Posicionamiento gastronómico

Ahora bien, para poder posicionar estratégicamente la gastronomía dominicana, se debe entender todo lo relacionado con la teoría del posicionamiento estratégico. En este sentido, el presente informe se consultó los postulados de Porini (2012), quien consideró que el posicionamiento estratégico no es más que “una herramienta estratégica conceptual que permite asociar y representar marcas a conceptos valorados por el público al cual están dirigidas”. Es decir entonces, que implica una valoración aceptada, una representación simbólica conceptual de la marca que le permitirá “buscar y encontrar” su lugar dentro de la mente de un consumidor o prospecto.

Ante este factor teórico, se debe decir que posicionamiento estratégico y su puesta en marcha en la República Dominicana, lo que demanda es una definición precisa de cada uno de los elementos que conforman al producto turístico gastronómico y por otra parte, considerar el desarrollo de métodos expeditos que permitan producir y comercializar de manera asertiva cada uno de las ofertas que se puedan desarrollar en base a las potencialidades de la isla.

Entorno competitivo

Ahora bien, ya conociendo los elementos de posicionamiento estratégico necesarios para desarrollar el turismo y posicionar estratégicamente la gastronomía, se debe estudiar el entorno competitivo que afecta a la realidad de República Dominicana como destino. En la siguiente gráfica, se resaltarán todos aquellos destinos turísticos que compiten directamente con la República Dominicana, especialmente en todos los elementos relacionados con la gastronomía, con el fin de tener una estadística certera que permita orientar las estrategias de posicionamiento hacia los objetivos necesarios para el impulso de esta tipología de turismo en la nación.

Imagen 1. Promoción turística por destino turístico, extraído de visitpanama.com (2016).

El primer elemento definitorio dentro del entorno competitivo de la República Dominicana, devela que el país hace una importante inversión en promoción turística, lo cual significa que se encuentra dentro del mapa de las principales opciones del Caribe en cuanto a destinos de turismo de sol y playa. Sin embargo, estas buenas prácticas también deben repetirse en la promoción del turismo gastronómico, ya que requerirá de una combinación armónica entre los medios impresos y los medios digitales, con el fin de darle a conocer a la demanda que existen muchas más alternativas de turismo de República Dominicana que las tradicionales.

Asimismo, para una valoración efectiva del entorno competitivo de la isla, se consultó el trabajo de Rojas y Mella (2017), en el cual se precisan todos los detalles que resaltan de la situación actual de la República Dominicana en el ámbito turístico dejando evaluaciones desde el contexto de inversiones, política y condiciones favorables para el turismo; la valoración de la infraestructura y la evaluación de los recursos naturales y culturales ante lo cual se obtuvo que la República Dominicana quedó muy alejado de los líderes de la región al ocupar la posición 76 dentro del índice y la posición 13 de los 20 países incluidos para la región de América Latina y el Caribe.

De acuerdo con este informe, la República Dominicana en el ámbito turístico obtuvo la siguiente valoración:

Respecto a la versión anterior del informe, la República Dominicana incrementó ligeramente su punta al pasar de 3.5 en 2015 a 3.6 en 2017, de un puntaje máximo de 7. En cuanto a posición, parecería que el país mejoró 5 posiciones dentro del índice, al pasar del 81° lugar en 2015 al 76° en 2017. Sin embargo, esta mejoría de 5 lugares debió a la exclusión de 5 países de los cálculos en esta edición del índice: mientras en 2015 se incluyeron 141 países, en 2017 sólo se incluyeron 136.

Esto quiere decir entonces, que

La República Dominicana todavía presenta retos importantes en el sub-índice de Ambiente Favorable para la Inversión, dado que ocupa la 99° posición; los pilares de Clima de Negocios, Seguridad y Protección, y Recursos Humanos y Mercado Laboral sobresalen.

Es resaltable que aunque obtuvo un puntaje de 4.3 en Ambiente Favorable para la Inversión, la posición del país es relativamente débil, lo que implica que este subíndice es muy competitivo y que los demás países evaluados tienen mejor desempeño. En Políticas y Condiciones Favorables para el sector, en la 65° posición, el país se ubica en el rango medio del listado de países. Mientras que en el subíndice sobre Recursos Naturales y Culturales, el país se ubica en la 80° posición. De los 4 sub-índice, en el que mejor posicionado está la República Dominicana es en el Infraestructura, ocupando el 62° en el mismo y con un pilar de infraestructura turística que ocupa la posición 51°.

Aunado a esto, la República Dominicana de acuerdo al informe consultado, presenta ciertas debilidades que deben ser fortalecidas a partir de las estrategias para posicionar la gastronomía que se encuentran en este informe. En ese sentido, se debe decir que la isla se encuentra en una posición muy débil en lo que respecta a la estrategia de marketing de la marca país, en la cual de acuerdo al ranking, se encuentra en el puesto 92 del mundo, todo a pesar de que República Dominicana cuenta con distintos indicadores favorables para su gestión turística como por ejemplo, el puesto 13 que ostenta en el renglón de calidad de la infraestructura turística.

Imagen 2. Índice de competitividad de Viajes y Turismo de la República Dominicana, extraído de trabajo de Rojas y Mella (2017).

Todo esto es importante ya que un buen posicionamiento de la gastronomía local entre los consumidores que viven y visitan el país ayuda a la seguridad alimentaria del país, ya que al consumirse platos con ingredientes locales garantizaría que los productores de rubros agrícolas puedan colocar su producción sin problemas en el mercado lo cual haría más rentable la producción agrícola y por tanto un incentivo para quedar en el campo haciendo lo que sabe hacer en vez de migrar a las ciudades a ocupar los famosos anillos de pobreza. Además, este posicionamiento se puede convertir en una fuerte barrera a estilos de consumo foráneos que afectan nuestra balanza de pagos al tener que importar una gran cantidad de productos que no se producen en el país.

Marco de acción del posicionamiento de la gastronomía dominicana

Por otra parte, en cuanto al marco de acción del posicionamiento de la gastronomía dominicana, se debe decir en primer lugar que un elemento relevante en el desarrollo de dicho posicionamiento, es su competitividad. En ese sentido, la construcción y consolidación de su imagen en mercados nacionales e internacionales, es vital.

Imagen 3. Resumen de la competitividad de Viajes y Turismo de la República Dominicana, extraído de trabajo de Rojas y Mella (2017).

Por ello, la construcción de una imagen país requiere del diseño de herramientas de comunicación efectivas que permitan fortalecer las relaciones internacionales en sectores como el turismo, la inversión, las exportaciones, y auspiciar encuentros oficiales entre Estados, la proyección nacional, la estandarización de los símbolos patrios y la promoción de conciencia ciudadana.

Adicionalmente, el marco de acción debe considerar que esta marca se debe centrar en un solo concepto el esfuerzo de comunicación y por sí sola, debe enviar un mensaje que integre la cultura, nuestros atractivos (sol, playa, alegría) y riqueza de ingredientes. Una marca definida y clara que refuerce el concepto territorial de la gastronomía, permitiría a la República Dominicana, proyectar una imagen exportable más allá de lo que ya representa la isla generando una ventaja competitiva basada en una promesa de una vivencia única y emocional que podemos ofrecer con nuestras comidas y bebidas.

Todo este planteamiento lleva a una premisa muy importante. Si la marca del destino de República Dominicana no se encuentra en una posición estratégica dentro de la mente del consumidor, se pudiera considerar la idea de relanzar la marca turística destino del país pero asociada en esta oportunidad con todos los elementos gastronómicos que identifican la idiosincrasia del país y contar con una innovación para poder reorientar los esfuerzos e inversiones cuantiosas que se hacen a nivel de marketing para promocionar la isla.

Todo esto es muy interesante, ya que desde una perspectiva consultiva de los informes descritos previamente, se pudo notar que en el caso mexicano (que es el país que genera mayores ingresos en América latina por concepto de turismo, los especialistas que laboraron dicho documento de trabajo argumentan que ese país se posiciona de manera estratégica, debido a que cuenta con muchos elementos culturales que transmiten sus ancestros y sus antepasados, especialmente su forma de vida, su cultura y su gastronomía, dejando entre otros planteamientos que países como la República Dominicana, quienes tienen una inversión importante en promoción turística, no tienen los suficientes elementos históricos resaltados dentro del diseño de su marca país, lo cual afirma la hipótesis de poder diseñar una marca que englobe especialmente a la gastronomía.

En ese sentido, es importante que la gastronomía ocupe un lugar importante dentro del diseño de productos turísticos dentro del República Dominicana, ya que dentro de la valoración expresa en los distintos informes acerca del nivel de competitividad del país, se resalta que existe un acervo histórico muy importante en esta área (gastronomía), que no ha sido aprovechada desde el punto de vista de marketing, razón por la cual el enfoque estratégico de posicionamiento tiene que estar orientado a la creación de acciones tácticas que puedan integrar a todos los elementos del sistema turístico para la generación de ofertas turísticas alternativas a los productos de sol y playa tradicionales que han posicionado a la isla.

Asimismo, dentro de los objetivos principales del desarrollo de dicha marca de turismo gastronómico para la República Dominicana debería tener ciertos elementos que basados en la teoría de Kotler (2012), son aspectos que se deben tomar en cuenta y que a su vez son fundamentales para la puesta en marcha de estrategias de posicionamiento a nivel de marketing:

• Establecer el concepto sobre el cual se enfocarán todas las actividades de comunicación.
• Agregar valor al producto y posicionarlo para que sea fácilmente reconocido a nivel local e internacional.
• Generar en el público potencial la expectativa de vivir una experiencia emocional a través de los platos y bebidas.
• Establecer una imagen, símbolo o frase (o la suma de todos) que generen una identidad que personifique la gastronomía local.
• Manifestar una diferenciación y una ventaja competitiva sobre otras gastronomías.
• Ayudar a posicionar una identidad clara, precisa y bien delimitada.
• Ser un elemento que permita ser utilizado en las estrategias de marketing para posicionar la gastronomía del país a nivel nacional e internacional.
• Articular estrategias y actividades en consonancia con las de la Marca País.

Ahora bien, conociendo el marco de acción existen muchas experiencias documentadas que mencionan ciertos escenarios no deseados, por lo cual en el presente trabajo de investigación se mencionan algunos aspectos que se deben considerar antes de plantear las estrategias para posicionar la gastronomía dominicana, tomando en cuenta lo siguiente:

• La gastronomía al ser el resultado de la combinación de distintos ingredientes provenientes de las localidades donde se producen los mismos, no se debe pasar por alto el hecho de estandarizar no sólo la preparación de dicha oferta gastronómica, sino que también deben estandarizarse todos los aspectos relacionados con la calidad de los productos a utilizar en dicho proceso de preparación.
• Otro elemento que es fundamental para la puesta en marcha de un conjunto de estrategias de esta naturaleza, tendría que ser la identificación plena de los miembros del sistema turístico nacional Dominicana, ya que si se delega toda la responsabilidad al Estado, se pudieran generar espacios de burocracia que pudieran interrumpir el proceso de ejecución de dichas estrategias planteadas en el presente informe.
• De acuerdo con el punto anterior, no se deben delegar responsabilidades ambiguas a sectores que dentro de su naturaleza, no viven directamente de la actividad turística, sino que en cambio, deben delegarse las acciones directas con los principales actores que intervienen en el proceso de producción y comercialización de productos turísticos asociados a la gastronomía.
• Del mismo modo, no se pueden establecer un conjunto de estrategias para posicionar la gastronomía dominicana si no existe un sistema de indicadores que permitan medir el alcance y el desempeño de cada una de las estrategias en el tiempo, porque si no se estarían incurriendo en espacios de empirismo que son muy nocivos dentro de la planificación estratégica de la actividad turística.
• Por último, este conjunto de estrategias que serán presentadas en las siguientes líneas, deben contar con actores directos e indirectos, ya que si no se delega las responsabilidades concretas a ciertos factores clave dentro de la ejecución de un plan de esta naturaleza, se estarían generando espacios de incumplimiento muy importantes que pudieran generar escenarios de desmotivación al logró en este tipo de objetivos.

Estrategias de posicionamiento

En esta parte del documento, se explican cada una de las estrategias de posicionamiento que deben ejecutarse en República Dominicana, así como las acciones en concreto para que se pueda contar con un plan de acción efectivo que permita el logro de los objetivos, así como la interacción entre todos los componentes del sistema turístico dominicano, ya que es uno de los retos más importantes que debe asumir la isla para poder implementar una alternativa al turismo de sol y playa que busque ser una innovación mundial en el turismo. Por ello se tiene lo siguiente:

Estrategia 1. Conformar un comité de desarrollo del turismo gastronómico República Dominicana. Esta estrategia es una de las principales a ser ejecutadas, ya que se conoce que en todos los países, existe un sistema turístico que lo conforman el sector público, el sector privado, el sector académico y el sector de las comunidades. En ese sentido, se deben sumar esfuerzos mediante mesas de trabajo que permitan en primer término, la conformación de dicho equipo de trabajo para seguidamente, diseñar un plan de desarrollo estratégico con un cúmulo de responsabilidades a cada sector bien definidas y al mismo tiempo, con la apertura de mecanismo de comunicación en tiempo real entre estos sectores.

Esto permitirá en primera instancia, orientar el desarrollo de la República Dominicana a nivel de gastronomía desde una perspectiva estratégica, dejando de un lado las prácticas asociadas al empirismo que son muy nocivas en un procedimiento de esta naturaleza. Asimismo, esta estrategia es fundamental, ya que se definirán las estrategias de posicionamiento y al mismo tiempo, serían validadas por los propios actores involucrados en dicho desarrollo. En este punto, es importante acotar que deben desarrollarse una serie de reuniones donde se concreten dicho punto, todo con mediación entre el sector público y el sector privado.

Estrategia 2. Realizar un inventario de todos los prestadores de servicios asociados con la actividad turística, en conjunto con la data perteneciente a todos los productores locales de la zona así como los rubros y capacidades de cada uno para el relanzamiento de la gastronomía dominicana como producto turístico. En este sentido, la estrategia inicia con un inventario de todos estos prestadores de servicios turísticos que cuentan con servicios de gastronomía como oferta principal así como también como oferta complementaria, ya que es de vital importancia de tener una información precisa que permita diseñar un plan de comercialización y marketing ajustado a las necesidades de estos.

Del mismo modo, se debe tener un inventario preciso de las capacidades, rubros y personalidades que se encargan de la producción de materia prima para la gastronomía en dominicana, así como los indicadores asociados al proceso de importación de productos similares, con el fin de evitar que se proliferen productos que no sean del entorno de la isla, ya que se perdería el elemento esencial para el desarrollo del turismo gastronómico como de la idiosincrasia detrás de los ingredientes de cada platillo.

Dicha estrategia debe ser aplicada como resultado de la integración de los sectores involucrados en el desarrollo del producto turístico gastronómico de la República Dominicana, ya que el siguiente paso es fundamental para las etapas de comercialización y seguimiento en cuanto a los indicadores económicos de esta tipología del turismo.

El hecho de contar con un inventario preciso de todos los prestadores de servicios turísticos de la isla, así como de las capacidades y naturaleza de producción de los emprendedores locales, se estaría contando con datos precisos acerca de la capacidad de atención del turismo gastronómico dentro de la propia República Dominicana, tomando como materia prima los materiales e ingredientes que son oriundos de toda la zona que conforman al país.

Estrategia 3. Relanzar la marca destino de República Dominicana, incorporando al producto turístico gastronómico. Esta estrategia tiene una significación muy elemental, ya que de acuerdo a los informes consultados previamente, la marca destino ocupa el lugar 92 del mundo en cuanto al posicionamiento estratégico a nivel de marketing en la mente de los consumidores, lo cual representa un dato muy importante que indica que debe ser relanzada la marca país.

Por estas razones, la incorporación de elementos propios de la gastronomía dominicana, permitirá a todos los integrantes del sistema turístico nacional, sentirse identificados con cada uno de los elementos que definan a la marca de país nueva donde se destaquen los productos tradicionales y las innovaciones turísticas concentradas en el turismo gastronómico y las actividades complementarias que se desprenden de la praxis de este tipo de ofertas.

Todo esto sería posible, a través de la contratación de un equipo experto en construcción de marcas con el fin de posicionar nuevamente la República Dominicana como destino turístico, haciendo un refrescamiento estratégico de la misma, tomando en cuenta la gastronomía como es el factor imprescindible dentro de la experiencia que vivirá el turista dentro de la isla, respondiendo de esta manera al carácter relacional que tanto demanda el turista actual.

Estrategia 4. Adoptar una política pública que permita la inscripción en los estándares internacionales de la mayor cantidad de productos posibles con certificación de denominación de origen. Esto quiere decir entonces, que el proceso de producción de la gastronomía dominicana aparte de estar estandarizada a nivel de operaciones y de composición de los ingredientes, requiere de certificaciones de origen que les permitan mejorar a nivel de marketing la oferta turística gastronómica, ya que se debe recordar que la certificación de origen es un elemento muy importante dentro del posicionamiento de un producto turístico, sobre todo si responde a algo tan esencial como la gastronomía.

Al mismo tiempo, las certificaciones de origen estarían protegiendo la producción local de los rubros y al mismo tiempo, serían tomados en cuenta como las prioridades para la elaboración de todos los platillos de asociados con la oferta gastronómica de la República Dominicana, asegurando desde la visión sustentable, el uso y preservación de las condiciones necesarias para la existencia permanente de dichos productos y de la conservación ambiental.

Esta estrategia se lograría a partir de la implementación de políticas públicas por parte del Estado dominicano, donde se puedan inscribir las distintas alternativas de denominación de origen que a su vez, realizarán el valor y el acervo histórico de la República Dominicana como una tradición gastronómica ancestral.

Estrategia 5. Diseñar y ejecutar un plan de formación, capacitación y sensibilización en el turismo gastronómico, dirigido a todos los integrantes del sistema turístico nacional. Este punto es muy importante, ya que en muchos casos, se necesita la formación en los procedimientos y métodos profesionales para la confección de oferta turística gastronómica. Asimismo, se requiere de una capacitación que mejore las operaciones a nivel de oficios que permitan la certificación de profesiones como mesoneros y cocineros que entre otros, mejorarían significativamente el desarrollo turístico gastronómico de la isla.

Finalmente, esta estrategia tiene que ver con la sensibilización de la comunidad locales hacia las bondades de los distintos productos que conforman la oferta gastronómica de la República Dominicana, ya que representaría un enfoque estratégico para el logro de los objetivos de posicionamiento de la isla.

Estrategia 6. Comercializar a través de canales físicos y electrónicos, todos los elementos de la marca turística gastronómica dominicana. Este punto es muy importante retomarlo, ya que existe la experiencia en diversos países donde tienen un producto turístico excelente pero al no contar con estrategias de comercialización certeras y precisas, el producto pierde su valor y quizás ningún turista internacional pueda llegar a conocer las características del mismo, ya que no conoce la información al respecto.

En este sentido, la República Dominicana tomando en cuenta que tiene un gasto turístico muy importante para la promoción, lo que debe es reorientar las estrategias en este sentido, ya que no se explica por qué la marca país se encuentra en el lugar 92 del mundo si es uno de los países de América latina, especialmente de las islas del Caribe que más invierte en promoción turística.

Esto en pocas palabras, significa que las estrategias actuales de posicionamiento y de comercialización turística han venido fallando, ya que hay países que invierten mucho menos si se encuentra mejor ubicados en la competitividad turística, de acuerdo al informe redactado por la Organización Mundial del Turismo (OMT, 2016).

Por todo esto, este conjunto de estrategias simples y certeras, lo que deben tener consigo es un método de implementación y seguimiento que permita conocer los avances y retrasos que pueda tener cada una de las estrategias propuestas previamente. Al respecto, se señalarán ciertos indicadores que deben tomarse en cuenta para luego establecer ciertas metas, producto del resultado de los primeros encuentros entre todos los actores del sector turismo de la isla, razón por la cual estos serían los principales indicadores:

• Número de productores locales como proveedores de materia prima.
• Número de productos con la certificación de «Denominación de origen”.
• Número de visitas nacionales en temporada baja.
• Número de visitas internacionales en temporada baja.
• Nivel de satisfacción del turista con los productos turísticos gastronómicos.
• Número de productos turísticos gastronómicos en el mercado.
• Número de seguidores en los perfiles de la marca país en las distintas redes sociales como Facebook, Instagram, Twitter, Snapchat entre otras.
• Valoración del destino República Dominicana desde portales de opinión como Trip Advisor.
• Número de eventos organizados para el posicionamiento de la dominicana gastronómica.
• Nivel de ingresos que genera el turismo gastronómico en la República Dominicana.
• Nivel de gasto turístico que efectúa un turista gastronómico en la República Dominicana.
• Promedio de días que pernocta un turista gastronómico la República Dominicana.
• Nivel de recaudación de impuestos en la República Dominicana por concepto de turismo gastronómico.

Todos estos indicadores lo que permitirán, es medir el desempeño del turismo gastronómico en la isla a partir de la implementación de cada una de estas estrategias que logren posicionar de una manera contundente a las diferentes alternativas de productos turísticos asociados con la gastronomía. Al mismo tiempo, se debe tener en claro quiénes son los responsables de la ejecución de cada una de esas estrategias, ya que es muy importante saber acerca de los responsables y también, para tener el conocimiento de en qué sitio se encuentra el desarrollo del turismo gastronómico en la República Dominicana.

Conclusiones

Ahora bien, dentro de las conclusiones que se pueden tener luego del desarrollo de esta investigación que buscó generar las estrategias para posicionar la gastronomía dominicana dentro del desarrollo de productos turísticos alternativos a los de sol y playa, se han tenido diversas reflexiones que han sido muy importante destacar y que al mismo tiempo, genera una serie de sugerencias que deben ser tomadas por estos integrantes del sistema turístico nacional y de esta forma, reducir el margen de error en la implementación de un plan de esta naturaleza, ante lo cual se tienen los siguientes:

La gastronomía incorpora elementos muy importantes que no sólo envuelven al trabajo profesional que pueda hacer un Chef, sino que también incorpora los saberes ancestrales que definen la idiosincrasia de los dominicanos como lo es la cocina, el producto y el territorio. Estos tres elementos, definen la identidad de un platillo y pueden inclusive, contar una historia muy interesante acerca de la cultura del país.

En este sentido, el turismo gastronómico tiene la gran posibilidad de incorporar a todos los eslabones de la cadena productiva de manera activa para el diseño y comercialización de productos turísticos de esta naturaleza, ya que requiere de los ingredientes de las distintas regiones para poder elaborar los distintos platillos que son parte de la cultura dominicana.

Del mismo modo, el turismo gastronómico le va a permitir a la República Dominicana, construir una narrativa diferente a la utilizada en los años anteriores, relacionada con el producto de sol y playa, ya que la gastronomía brinda un escenario muy amplio donde pueden difundirse todas las historias que describen el Génesis y el valor histórico de cada uno de los ingredientes que se utilizan para la preparación de un platillo, lo cual supone un elemento muy estratégico a ser tomado en cuenta para ganar posiciones con respecto al caso que se mencionó previamente (México).

Por todo esto, el desarrollo o relanzamiento de la marca turística, es una obligación por parte de las autoridades y sector privado de la República Dominicana, ya que requieren contratar a ciertos expertos que puedan identificar todos los elementos que permitan un refrescamiento de dicha marca, incorporando los elementos gastronómicos a la misma. Todo esto, debido a que durante el proceso de refrescamiento de dicha marca, participarían los actores directos e indirectos en la producción y comercialización de los productos turísticos del país, dándole no sólo una validez objetiva dicho procedimiento, sino extraer lo más profundo del dominicano para ser incorporado en dicha marca.

Otro elemento fundamental dentro de esta implementación de las estrategias, tiene que ver con el último punto mencionado, asociado al proceso de formación, capacitación y sensibilización de todos los actores de la cadena de valor del turismo gastronómico, ya que es muy importante que los productores locales conozcan métodos precisos que les permitan aprovechar al máximo los ingredientes de la localidad pero al mismo tiempo, profesionalizar a todos esos sectores que requieren de una formación técnica que les permita mejorar su oferta a nivel competitivo.

Todo esto permitiría en un futuro no muy lejano, que la República Dominicana pueda obtener muchas certificaciones asociadas a la gastronomía que le garantice un flujo de turistas muy atractivo durante las diferentes temporadas del año, pudiendo ser inclusive un ejemplo a seguir por parte de otros países que puedan tener características similares.

Por último, la implementación del turismo gastronómico la República Dominicana es una gran oportunidad con la que cuentan todos los actores del sistema turístico local, ya que no sólo contarían con los flujos turísticos actuales provenientes del turismo de sol y playa, sino que también se diversificaría la oferta turística y al mismo tiempo, se estaría incluyendo activamente a todos los productores locales de materia prima de cualquiera de las regiones de la República Dominicana, lo cual significaría un gran paso hacia adelante dentro de la conformación de respuestas objetivas a las conclusiones llegadas en los distintos foros internacionales.

Es aquí, donde el posicionamiento estratégico de la gastronomía dominicana puede jugar un papel de trascendental importancia para convertirse en un atractivo que complemente una oferta turística diferenciada, o que por sí sola, atraiga a locales y extranjeros que quieran vivir la experiencia de saborear la cultura Dominicana a través de la comidas y bebidas.

Referencias Bibliográficas

Fuentes impresas consultadas

Basque Culinary Center (BCC) y la Organización Mundial de Turismo (OMT) (2017). I Foro Mundial del Turismo Gastronómico: 10 conclusiones. España.

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Páginas web consultadas